DAYMES MORALES RUIZ
SAN FRANCISCO DE CAMPECHE, Campeche, 15 de septiembre.- “¡Libertad, libertad!”, fue el grito más escuchado en la marcha que personas con diferentes peticiones lanzaron a lo largo de su recorrido, hasta llegar al centro de convenciones donde rendiría protesta el nuevo gobernador Fernando Ortega Bernés.
Aunque dijeron que la marcha saldría del campamento en los bajos del palacio de gobierno a las 10:00 de la mañana, se retrasó mientras desayunaban y se organizaban.
Antes de salir se percataron de que los diputados se juntaron a un costado del Palacio Legislativo para irse a la toma de protesta. Cuando el camión pasó frente al Palacio fue interceptado por los manifestantes quienes rayaron el transporte e impidieron que pase.
“¡Esos son, esos son los que chi… a la nación!”, gritaron y lo escribieron en el autobús hasta que policías de Vialidad dejaron libre el paso en la parte de atrás y el camión salió en reversa.
Aunque no hubo un enfrentamiento con los policías cuando impidieron el paso al vehículo, hubo movimiento entre algunos que sospechosamente estaban cerca, por suerte no pasó a mayores.
Aparentemente este bloqueo anticipaba que la marcha sería agresiva o que habría un enfrentamiento.
Alrededor de las 11:00 de la mañana varios contingentes se formaron en el circuito Baluartes. Los Ebuleños, quienes no sumaban más de 50 iban adelante, luego seguían los candelarenses quienes piden la liberación de Sara López, Joaquín Aguilar, Elmer Castellanos, Guadalupe Borjas y Guadalupe Lizcano, presos de Candelaria, y quienes eran la mayoría unos 100; después seguían los integrantes de varias asociaciones civiles que vinieron a “apoyar” a los Ebuleños y al final, cuando la marcha ya había avanzado se unieron los trabajadores del Gobierno del Estado que protestan por el precio de sus casas.
Mientras esto sucedía el caos en las vías aledañas era evidente, miles de conductores se amontonaban para entrar al centro y salir de el.
Por fin pasadas de las 11 de la mañana salieron, durante el camino los gritos de protesta no se esperaron además de las pintas en edificios como la sede del PRI. Los policías ni se acercaron a los “pintores” quizás para evitar provocaciones.
No respetaron nada ni el Bancomer frente al centro de convenciones a pesar de ser propiedad privada, ahí fue donde se encontraron con las primeras vallas y policías a quienes les gritaron: “Policía qué lástima me das teniendo tu las armas y no puedes protestar”, “Policía idiota el gobierno también te explota”. A pesar de eso los PEP no les hicieron caso.
Fueron a la siguiente puerta frente a los cinemas Hollywood donde entraban los vehículos y ahí continuaron los gritos. Luego de dejar los cines llenos de dibujos y letreros continuaron por la avenida María Lavalle Urbina hasta el monumento del mismo nombre que también adornaron con pintas.
Siguieron por la Román Piña Chan hasta el malecón donde se instalaron en la entrada principal del Centro de convenciones e iniciaron una serie de discursos dichos por cada uno de los representantes de las organizaciones. Leyeron un pronunciamiento donde solicitan la solución al problema de Ebulá, la liberación de los presos de Candelaria por no pagar altas tarifas de la CFE , dijeron que el gobierno se inicia con presos políticos y que este es un ejemplo de cómo gobernará pues mencionaron que en lugar de atenderlos puso vallas y policías.
Al final de la toma de protestas los gritos por el equipo de sonido que llevaban en contra de los invitados no cesó hasta que decidieron regresar a su campamento por el malecón mientras detrás dejaban una estela de congestionamiento vial y edificios rayados.
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